Paciencia: forma menor de desesperación disfrazada de virtud.

Hoy me dices que tengo que tener paciencia, que tengo que dejarte respirar, que tengo que dejarte libertad, que tengo que dejarte de llamar... también tengo que dejarte de amar?, también tengo que dejar de soñar?...

Hoy me dices que tengo que comprenderte, y cómo? si no me lo dices, y cómo? si no me coges las llamadas?, cómo he de saber que estás mal? si nisiquiera me llamas.
Si al menos pudiera verte, lo notaría en tu mirada, si al menos pudiera oirte, lo notaría en tus silencios, si al menos pudiera... si al menos creyeras que sí puedo ser tu amiga, que sí puedes contar conmigo, que soy paciente, que te comprendo, que no soy tu carga, que quiero ser tu apoyo, ser tu hombro, ser tus pies y tus manos, ser la que te mime, la que te haga sonreir, la que te haga feliz, la que te ame, la que esté a tu lado por siempre.

Hoy me dices que me sigues queriendo, pero que necesitas tiempo, que necesitas estar solo, pensar, organizar tu cabeza, organizar tu vida, y te pregunto, entro yo en algún huequito de tu cabeza?, y de tu vida?